Argentina: El trabajo esclavo con agrotóxicos en la empresa avícola «Nuestra Huella» asesina de un tumor cerebral a Ezequiel Ferreira, de 6 años

( fotografía: Ezequiel Ferreira, niño de 6 años muerto por tumor cerebral tras 2 años de esclavitud manipulando agrotóxicos en la empresa avícola «Nuestra Huella», denunciada en agosto de 2008 por La Alameda-Movimiento de Trabajadores Excluídos y Página 12 )

Llamado a la solidaridad: para escrachar a marcas y supermercados que venden «Trabajo Esclavo Infantil«

El video de trabajo infantil de la empresa que es proveedora de Wall Mart, Carrefour, Coto, Día y otros …:

Niños esclavos en Nuestra Huella S.A

prensaalameda|07 de febrero de 2010: Informe realizado por la Fundación Alameda acerca del trabajo infantil en las granjas pertenecientes a la empresa «Nuestra Huella» S.A. A través de imágenes inéditas y testimonios claves la Alameda demuestra como ésta empresa utliza la explotación infantil para acrecentar día a día sus ganancias.

Dejamos dos entradas contando lo que pasó con Ezequiel Ferreyra:

* 20 de noviembre día del trabajo infantil esclavo en la Argentina.

* A Carlos Tomada y su amigo Pedraza no les debe importar mucho el trabajo esclavo infantil.

Ezequiel Ferreyra lamentablemente murió … Algo que podemos hacer es no comprarles a los que explotan y matan a nuestros chicos:

Llamado a la solidaridad:

Avisen por favor dónde hay supermercados Coto, Disco, Carrefour, Walt Mart, Día, que tengan en sus góndolas huevos “Nuestra Huella” o “Avicooper” porque fueron hechos con trabajo esclavo e infantil. En el caso de los supermercados Día que aparecen con “etiqueta propia” exijan que informen fehacientemente dónde fueron elaborados porque también le compra a la empresa esclavista, asesina de niños. En la cadena La Economía de Pilar se vende estos huevos. Con motivos de las denuncias cambiaron el estuchado y les pusieron huevos “Argentinos s.a.”. Hace un mes volvieron a cambiar el estuchado, Ovoprot le compra el 70 % de su producción para venderle a Nestlé u Unillever de la Comunidad Económica Europea-Unión Europea.

Ovoprot, una empresa de capitales austriacos, promociona en su página a los huevos Nuestra Huella aunque no lo dice directamente. “Sabía usted que Argentina nunca ha tenido Influenza Aviar en toda su historia? Puede descansar, Ovoprot provee el mejor producto Premium de calidad internacional solamente desde Argentina”. Esperemos que los austriacos y su Estado empiecen a controlar el proveedor de Ovoprot.

Contacto: 15 6158 4835 o por mail: [email protected]

Fuente La Alameda

Estemos atentos y No Les Compremos A Estos Asesinos De Chicos!!!

Fuente: Partido Pirata Argentino

Fabiana Arencibia, Red Eco Alternativo, Buenos Aires, 18/11/2010

La Huella del trabajo esclavo

Mientras honramos deudas inventadas que benefician a “clubes” del primer mundo -pero no a la vida-, este modelo, que muchos piden profundizar, acaba de cobrarse una nueva víctima. Un niño de seis años murió de un cáncer en su cabeza producto del trabajo esclavo manipulando agrotóxicos.

Hoy, las tapas de los diarios nacionales reflejaban el “escándalo” durante la sesión de ayer en la Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso, cuando una diputada sopapeó a su colega. En todos los canales de TV, los anti y los pro oficialistas se preocupaban por dar cuenta de las facturas que se pasaban parlamentarios, opositores y kirchneristas, por la fracasada sesión para aprobar la ley de presupuesto 2011.

Otra de las noticias del día era el rescate luego de siete horas, de una niña de 3 años que se cayó en un pozo. En las imágenes aparecía, al estilo Sebastián Piñeira, el gobernador bonaerense Daniel Sicioli listo para recibir a Vanesa cuando la sacaran.

Pero la muerte de Ezequiel no estaba en las tapas de los diarios ni en la televisión. Tenía seis años y llevaba dos trabajando junto a sus padres. Lo de “trabajando” es sólo un eufemismo. Era esclavo junto a sus padres de Alejandra López Camelo, presidenta de la empresa «Nuestra Huella».

Esta firma, líder en el mercado avícola y proveedora de grandes hipermercados, es responsable de trabajo esclavo e infantil, de alambrados electrificados, de trata y tráfico de personas, tal como lo denuncian integrantes de la Fundación Alameda y del Movimiento de Trabajadores Excluidos. López Camelo es prima hermana del intendente de Pilar, Humberto Zúccaro, y cuñada del secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores local (UATRE), Jorge Herrera. El ex intendente de esa ciudad, Sergio Bivort, es ahora abogado de su empresa. ¿Alguna duda de los por qué de la impunidad que la rodea?.

Ezequiel Ferreyra (… y su apellido no hizo más que remitirme a Mariano, asesinado también pero por la burocracia sindical) murió el martes. Por su edad no forma parte de los 25 niños y niñas que, antes de llegar al año, mueren diariamente en nuestro país por causas que son evitables, especialmente derivadas del hambre.
Ezequiel llegó a Buenos Aires desde Misiones a fines de 2007 junto con su familia. Lo trajeron para que no muriera allí por la miseria y la pobreza. Pero la muerte lo alcanzó en Buenos Aires. Su padre comenzó a trabajar en “La Fernández”, una de las 70 granjas que son propiedad de la empresa «Nuestra Huella». Pero para cumplir con el tope de la producción que los patrones le imponían tuvo que incorporar a la faena a toda su familia.

En esas granjas trabajan más de 200 niños y niñas, entre la sangre y el guano de las gallinas, manipulando venenos con elementos cancerígenos. Ezequiel se fue enfermando entre jornada y jornada. Se dormía en la escuela, hasta que a fines de setiembre se desmayó. Pero el tumor en su cabecita ya estaba. Y nada pudo evitar que creciera hasta matarlo.

La empresa prohibió a sus padres que hablaran de lo que sucedía con el niño. Les metieron miedo. Les dijeron que podían ser acusados penalmente por abandono de persona y que la justicia podría quitarles a sus otros hijos. Como para tranquilizar su ¿conciencia? pagaron el tratamiento del niño con premura. Con la misma rapidez que armaron el entierro para evitar que se investigara las causas de su muerte.

Desde 2008, los costureros y cartoneros de la Alameda y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) vienen juntando pruebas y movilizándose para denunciar la esclavitud y el trabajo infantil en «Nuestra Huella». Ayer se presentaron en el juzgado para pedir la autopsia del cuerpo de Ezequiel. Mientras los funcionarios judiciales deliberaban, al niño lo enterraban. Allí estaban acompañando a sus padres, trabajadores de las granjas y también su dueña, la señora López Camelo, supervisando todo.

Gustavo Vera, de la Alameda, comentó que una hora después del entierro, el juzgado resolvió exhumarlo, poner custodia policial hasta que se terminaran los trámites, secuestrar la historia clínica para tener el certificado de defunción original, trasladar el cuerpo de Ezequiel a la morgue de la capital y resolver quiénes serán los peritos.

Ni el Ministerio de Trabajo de la Nación, ni el de la Provincia de Buenos Aires hicieron absolutamente nada a pesar de las denuncias que se les presentaron hace tiempo. Este último sólo se limitó a cobrarle a «Nuestra Huella» una multa de un millón de pesos a pagar en cómodas cuotas a partir de enero de este año.

No es que Ezequiel haya sido el primero. No es que con él aparece la muerte de “la niñez arriesgada por la estrecha ganancia”, como decía el querido Armando Tejada Gómez.

Es el momento en que ésto sucede: escándalos de palacio, un proyecto de presupuesto que prevé para el pago de deuda más del doble de lo que destina a salud, un discurso acerca de las bondades de pagarle al «Club de Paris» (mitad contraída por la dictadura y la otra mitad producto de un “blindaje” que permitió la fuga de capitales) y una apelación constante a que profundicemos un modelo de país que acaba de matar a este niño.

Audios de Juan Grabois (MTE) y Gustavo Vera (Alameda)

– Audio 1 Muerte de Ezequiel Ferreyra, niño víctima de trabajo esclavo. Las evidencias de trabajo infantil:

Las evidencias de trabajo infantil

– Audio 2 Muerte de Ezequiel Ferreyra, niño víctima de trabajo esclavo. El contexto de Nuestra Huella:

El contexto de «Nuestra Huella»

– Audio 3 Muerte de Ezequiel Ferreyra, niño víctima de trabajo esclavo. La connivencia judicial:

La connivencia judicial

– Audio 4 Muerte de Ezequiel Ferreyra, niño víctima de trabajo esclavo. La Inacción de los Ministerios:

La inacción de los Ministerios

– Audio 5 Muerte de Ezequiel Ferreyra, niño víctima de trabajo esclavo. Pedido de medidas precautorias:

Pedido de medidas precautorias

Fuente: Red Eco Alternativo

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Explotadores asesinos

Por Julio Leiva (unos días antes de la muerte de Ezequiel)

Ezequiel Ferreira tiene siete años y se debate entre la vida y la muerte en la sala de terapia intensiva del Centro Gallego, a causa del trabajo infantil.

Ezequiel fue explotado en la empresa rural «Nuestra Huella S.A.» desde los cinco años de edad, y allí contrajo cáncer, producto de la manipulación de agroquímicos. En estos momentos, su infancia, su salud, su futuro, se esfuman producto de la codicia, la esclavitud y la corrupción de empresarios, políticos y policías.

Ante la gravísima situación del niño, abogados de la Alameda y el MTE presentaron ayer una denuncia penal contra la empresa avícola «Nuestra Huella S.A.» El propio Ezequiel reconoció en un video de agosto de 2008 que trabajaba de remover el guano de las gallinas y manipular el veneno proveido por la empresa que distribuye huevos a grandes cadenas de supermercado locales como «Wall Mart» y «Carrefour» … La denuncia penal se presentó ante el fiscal federal de Campana, Orlando Bosco, en la causa que tramita en el juzgado Federal Nº 2 de Campana, por trata de personas y reducción a la servidumbre en las granjas de la empresa «Nuestra Huella».

Los abogados de la Alameda y el MTE solicitaron la indagatoria urgente a los dueños de la empresa que son: Alejandra Lopez Camelo, Leticia Esther Garcia de Luaces y Luz Luaces. Asimismo se solicitó a la justicia el secuestro de la historia clínica de Ezequiel Ferreira y una urgente supervisión médica del Juzgado Federal que determine las causas del gravísimo estado en que se encuentra el niño y su vinculación con la situación de servidumbre a la que estaba sometido por la empresa.

Parapetada junto a su cama, con una impunidad que asusta, Leticia García de Luaces -propietaria de esa empresa asesina y explotadora de Ezequiel- vigila tenazmente los movimientos del nosocomio, dispuesta a todo para tapar las pruebas que deberían llevarla tras las rejas.

Luaces y sus secuaces (su hija Luz y Alejandra López Camelo) saben cómo explotar la vulnerabilidad de familias migrantes extremadamente pobres, cómo silenciarlos, cómo perpetrar su dominio más allá de las cercas de sus granjas. También saben cómo comprar la complicidad de funcionarios, sindicalistas corruptos, policías y profesionales.

Es que la fortuna de los Luaces y la prosperidad de «Nuestra Huella» es producto de una aberrante trama de esclavitud, corrupción e impunidad que involucra importantes políticos, sindicalistas corruptos de UATRE, agentes de la división trata de personal de la Policía Federal, funcionarios del Ministerio de Trabajo.

«Nuestra Huella S.A.», es la principal empresa avícola del país, con una facturación que supera los 400 millones de pesos al año y exporta su producción al primer mundo. Cuenta con setenta granjas, cada una de las cuales tiene un promedio de cuatro galpones con unas 20.000 gallinas cada uno.

El sistema de producción de la empresa se basaba en la contratación “en blanco” de un trabajador por galpón, generalmente un migrante boliviano o de alguna provincia del norte argentino. El trabajador debía instalarse en la granja con su familia, que indefectiblemente se veía obligada a trabajar mancomunadamente para alcanzar los cupos de producción exigidos por la empresa.

Es decir, «Nuestra Huella» pagaba un sueldo y obtenía el trabajo de la mujer y los hijos del empleado.

La imagen de Ezequiel Ferreira recorrió el mundo cuando el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y la Fundación Alameda hicieron pública una denuncia por explotación infantil, reducción a servidumbre y trata de personas contra los directivos de «Nuestra Huella». Fue el día del niño de 2008, cuando un grupo de voluntarios se adentró en La Escondida, una de las granjas del horror ubicada dentro del exclusivo barrio Estancias del Pilar, para registrar las crudas imágenes de la explotación infantil.

Explotación infantil: Video realizado en agosto de 2008, cuando un grupo de miembros de la Alameda y el MTE disfrazados de Boy Scouts ingresaron a la granja La Fernandez, con la excusa de repartir regalos el día del niño y filmaron a los chicos trabajando: En el tramo que va del minuto 0.41” al 1.05” Ezequiel Ferreira cuenta cómo trabaja en la granja entre el guano y la sangre.

Fuente: Cheque en Blanco

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Falleció el niño esclavo en la empresa “Nuestra Huella

Murió el niño de seis años que desde los cuatro era esclavizado por la empresa avícola, «Nuestra Huella». El lunes de la semana pasada lo habían vuelto a operar, pero el tumor ya le había ocupado todo el cerebro. Su corta vida transcurrió la mayor parte de su tiempo entre la sangre y el guano de las gallinas y manipulando venenos con elementos cancerígenos de la empresa para cumplir a rajatabla con los topes de producción que le imponían a su familia.

Desde la organización La Alameda informan que “la empresa se dispone a hacer desaparecer las evidencias y pretende trasladar rápidamente el cuerpo de Ezequiel y quizás cremarlo”.

El niño fue traído junto a su familia desde Misiones a fines de 2007 por uno de los reclutadores que opera al servicio de la presidenta de la empresa Nuestra Huella, Alejandra López Camelo, y que cobraba 2500 pesos por cada familia. “La promesa era dejar la pobreza extrema de Misiones, por un trabajo estable y una casa segura. Los costos del traslado correrían por cuenta de la empresa”, explicó Gustavo Vera de la organzación La Asamblea al ser entrevistado por La Palangana.

Al llegar a la granja «La Fernández», la situación distaba mucho de lo prometido. Al padre lo pusieron a cargo de uno de los galpones, donde debía juntar miles de huevos por día, remover guano, juntar la sangre y distribuir el veneno. El tope de producción que le imponía la empresa era imposible de cumplir sin involucrar al resto del grupo familiar, lo cual era estimulado por los capataces de la empresa. Si no se cumplía ese tope se corría el riesgo de quedar sin trabajo y en la calle, esta vez a miles de kilómetros del lugar de origen y los conocidos. En condiciones normales allí tendrían que trabajar entre cuatro o cinco personas. Así que primero la esposa y luego los niños comenzaron a involucrarse en esas jornadas infernales de producción en el galpón.

Lo mismo pasaba en los galpones vecinos, donde ya estaba naturalizado que todos los grupos familiares trabajen a destajo, pero sólo para conformar el salario del padre, un salario más bajo que el de un peón rural. Cientos de familias más, son esclavizadas del mismo modo en unas 70 granjas dispersas por Pilar, Zarate, Campana, Exaltación de la Cruz y Córdoba donde muchísimos chicos están expuestos a correr la misma suerte. Esas granjas son propiedad de “Nuestra Huella”, una empresa que gozaba de prestigio y liderazgo en el mercado avícola y que tenía clientes poderosos como Wall Mart y Carrefour, hasta que comenzó a conocerse su costado más oscuro: trabajo esclavo e infantil, alambrados electrificados, trata y tráfico de personas.

Las horas y horas de filmación de trabajo infantil durante el 2008, 2009 y 2010, la granja allanada con la gente esclavizada y la alambrada electrificada, las 30 granjas de la empresa donde el Ministerio de Trabajo constató fehacientemente trabajo infantil en Nuestra Huella, los más de cuarenta testimonios de víctimas de la empresa, las filmaciones de las persecuciones y los intentos de sobornos a los denunciantes, los datos precisos de los reclutadores, nada, absolutamente nada fue suficiente para que la Jueza de Garantías en lo Penal de Campana, Graciela Cione , y el juez Federal II de Zárate y Campana, Adrián Charbay , hicieran justicia en las causas por reducción a la servidumbre y trabajo infantil y trata laboral y trafico de personas respectivamente.

Fuente: 103.7 on line

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Parecía que se había acabado la esclavitud pero …

Un chico de 7 años quedó internado en un centro asistencial de Capital Federal para ser tratado por un cáncer que contrajo luego de manipular agroquímicos, en una granja avícola en la que trabaja y que fue denunciada por “trabajo esclavo.

Se trata de Ezequiel Ferreira, que habría sido traído junto a su familia desde Misiones en 2008, seducidos por la promesa de casa y comida digna, aunque al llegar a la localidad bonaerense de Campana, donde está la granja, se encontró con otra realidad.

Así lo denunciaron la Asociación Civil La Alameda y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), ante la Justicia y frente al Centro Gallegos, ubicado en Balvanera, donde Ezequiel quedó internado en Terapia Intensiva.

La denuncia penal fue efectuada ante el fiscal de Campana, Orlando Bosco, contra las dueñas de la empresa avícola Nuestra Huella, Alejandra López Camelo, Leticia Esther García de Luaces y Luz Luaces.

Así, esta denuncia se sumó a la causa que investiga a las tres empresarias en el Juzgado Federal 2 de ese mismo partido, a cargo del magistrado Adrián González Chavay, a raíz de otros casos de reducción a la servidumbre, delito también conocido como «trabajo esclavo«.

La Alameda y el MTE precisaron que el chico de 7 años trabajaba en la granja en la remoción del guano de gallinas y manipulaba un agroquímico provisto por la empresa avícola, que distribuye huevos en cadenas de hipermercados.

La Asociación y el Movimiento destacaron que «Nuestra Huella» es una de las principales empresas avícolas del país, con una facturación anual que supera los 400 millones de pesos provenientes de los cuatro galpones con 20.000 gallinas cada uno.

El titular de La Alameda, Gustavo Vera , contó que el niño trabajaba en la granja conocida como «La Fernández» y subrayó que el menor de edad «fue traído desde Misiones con toda su familia para trabajar, a principios de 2008«.

«Trabajan allí el padre, la madre embarazada y dos hermanitos del niño«, dijo Vera, y afirmó que «las empresas suelen hacer eso, les prometen casa y comida a cambio de dinero y cuando vienen acá se dan cuenta de que para eso tiene que trabajar toda la familia«. Vera sostuvo que «cada granja está a cargo de una familia y la empresa, así, se ahorra sueldos«.

«En septiembre de 2008 el ministerio de Trabajo bonaerense multó por 1 millón de pesos a esta empresa por trabajo infantil«, recordó Vera, y dijo que «ese año difundimos un video donde se ve a la familia del niño. Ellos siguen allí, pero en la granja La Mimosa, donde los trasladaron después del video«.

El Código Penal, en tanto, prevé prisión de 4 a 10 años para los autores del delito de reducción a la servidumbre.

(Fuente:https://www.minutouno.com.ar/minutouno/nota/137774-internaron-a-un-chico-por-un-cancer-contraido-por-trabajo-esclavo/)

Realmente parece mentira q esto ocurra.

Esta empresa avícola «Nuestra Huella» q factura anualmente más de 400 millones de pesos de los cuatro galpones con 20.000 gallinas cada uno, es la responsable q este pobre chiquito de escasos 7 años esté internado en el htal en terapia intensiva porque padece de cáncer, q lo contrajo trabajando ahí.

Su familia vivía en Misiones y engañándolos diciéndoles q tendrían casa y comida dignas vinieron a esta granja q tiene la empresa en cuestión.

Ya acá, en Pvcia de Bs. As. la cosa cambió y toda la familia tuvo q trabajar: madre embarazada, padre y dos hermanitos del niño.
La realidad es escalofriante, ya q lo hacían trabajar al pequeño para remover guano de las gallinas y le daban, para q lo usara, un agroquímico q fue el q le produjo semejante enfermedad.
Hay tbm otros casos de empresas q actúan igual y serán investigadas, ya q les prometen casa y comida a cambio de dinero pero, cuando vienen de sus provincias se encuentran con q todos los miembros de la familia deben trabajar, aún los niños.

Este caso fue denunciado judicialmente por La Alameda (Asociación Civil) y el Movimiento de Trabajadores Excluídos.

Esta empresa avícola, como otras similares, tiene la costumbre de atrapar así a los pobres necesitados y mantiene cada granja con una familia y la empresa, ahorrando así los sueldos.

El Código Penal parece prevée una prisión de 4 a 10 años y la verdad q es poco, según mi criterio.

Estos al igual q el resto de los grandes del campo son los q normalmente se quejan cuando algo les aumenta, pero no sólo tienen empleados en negro sino, algunos bajo trabajo insalubre al punto tal, de contraer como en este caso cáncer y para colmo de males, no es bueno para nadie pero en una criaturita así, da más pena aún.

Las ansias de poder los corroe hasta llegar a esto, se cobran vidas, esto debería pagarse con más de 10 años porque a la madre y padre nadie le devuelve la salud de su hijo.

Espero se haga justicia.!!!

Siempre cuando se habla de los del campo, hablo los adinerados, se asocia inmediatamnete con «ombligos del mundo» pero éstos hasta pasaron esas barreras, convierten a las familias en esclavos de ellos.

Basta ya de injusticias. Lo q hacen no tiene adjetivos peyorativos q alcancen. Peor q basura son, porque no trabajan ellos!!!

Ruego porque ese inocente se salve y sufra lo menos posible!!!

Visión Siete: Niños explotados

TVPublicaArgentina|08 de noviembre de 2010: Grave denuncia de la Ong. La Alameda a la empresa «Nuestra Huella», por explotación infantil en las granjas de la firma avícola. Entrevista a Gustavo Vera, titular de La Alameda. Emitido por Visión Siete, noticiero de la TV Pública argentina, el lunes 8 de noviembre de 2010.

Fuente: Taringa!

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(26 de noviembre de 2010)